Ahora tocaría insultar a los antivacunas pero después de leer esto y meditarlo un poco, estoy de acuerdo en que no sirve de nada insultar, pues lo único que voy a conseguir es cabrear al padre, algo que no sirve de nada al hijo del imbécil. Perdón, ya se me ha escapado.
Padres antivacunas, las vacunas son muy seguras. Mucho más seguras que no vacunarse. ¿Existen riesgos? Por supuesto. No existe la seguridad 100%. Alguien podría confundirse y etiquetar frascos de morfina, al niño se le podría caer el techo del hospital encimaa el enfermero le podría clavar la jeringuilla en un ojo al estornudar, la vacuna le podría generar una alergia menor que es mucho mejor detectar lo antes posible y en un entorno controlado...
Por otro lado, podéis seguir poniendo en peligro a vuestros hijos para evitar la conspiración multinacional X o Y. Por desgracia, es vuestro derecho.
Y tengo que dejarlo aquí, porque tengo que ir a ingresar el cheque de la farmacéutica.
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