Dimiten dos ministros franceses acusados de despilfarrar el dinero público.
Los gobiernos de todo el mundo tiemblan al pensar que esto podría crear un precedente y forzar la dimisión de casi todos los políticos. Muchos ciudadanos de todo el mundo pensamos que los pocos políticos que quedaran en pie serían suficientes para llevar el mundo a un mejor lugar.
De todas formas, un punto para Sarkozy por empezar a vigilar el gasto público.
No te preocupes, que aquí no dimite ni D...Y aunque "los dimitan", pondrán a otros por el estilo, porque llega un momento en que ya nos hacen dudar a los que teníamos fé en la politica honesta. Un ¡bravo! para Sarkozy.
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