De entre las numerosas muestras de abuso policial el #25S, la del policía infiltrado recibiendo palos de sus compañeros se lleva la palma por lo que demuestra: que o bien había agentes realizando actos violentos para justificar las cargas, o que los antidisturbios se dedican a apalear a manifestantes que no han hecho nada.
Elijan la opción que les provoque menos rechazo. Y recuérdenlo cuando haya elecciones, porque no tenemos otra forma no violenta de conseguir cambiar las cosas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Se agradecen los comentarios de cualquier tipo e ideología, siempre que se hagan manteniendo las formas y el respeto.
Los comentarios anónimos serán eliminados, especialmente si no aportan nada al debate.